lunes, 7 de septiembre de 2009

Se revitaliza el mágico y misterioso viaje del sonido beatle



Este miércoles se lanza en todo el mundo una reedición digitalmente remasterizada del catálogo completo del grupo

A 22 años de la primera edición en compact de sus discos, recién ahora se volvió a trabajar de manera exhaustiva con las cintas de grabación originales de los Fabulosos Cuatro de Liverpool.


La espera terminó. O mejor dicho: termina dentro de tres días. Desde el pasado 7 de abril, los fans de los Beatles están esperando que llegue el día nueve del mes nueve del año cero nueve, fecha en que los directivos de EMI y Apple Corp anunciaron que estará por fin disponible una reedición digitalmente remasterizada del catálogo completo del grupo.

“Todos los álbumes originales lanzados en el Reino Unido, sumados Magical Mistery Tour y los Past Masters (una compilación de singles y EP que ahora aparecerán en un solo volumen) han sido amorosamente remasterizados por un dedicado equipo de los estudios Abbey Road. Como escucharán, esas clásicas grabaciones suenan mejor que nunca”, asegura la discográfica en la información que acompaña un muestrario de dos compacts al que tuvo acceso Crítica de la Argentina.

El tan esperado lanzamiento presenta 14 títulos, editados en forma individual y en estéreo (incluidos los cuatro primeros: Please Please Me, With The Beatles, A Hard Day’s Night y Beatles For Sale, que originalmente fueron registrados en mono), con packaging nuevo (aunque respetando la tapa original) y el agregado de fotos inéditas y notas ilustrativas sobre las sesiones de grabación.

El lanzamiento se completa con una tentación irresistible para los más fanáticos: las coquetas cajas The Beatles Stereo Box Set y The Beatles Mono Box Set. La primera contiene los 14 discos mezclados en estéreo, cada uno con un minidocumental en un archivo para ver en la computadora. El encargado de realizar los videos fue Bob Smeaton, el mismo que dirigió la serie Anthology, quien aquí compaginó imágenes de archivo, fotos raras y conversaciones de los Beatles en el estudio de grabación. Para quien quiera ver todos los videos juntos, la caja también trae un DVD de 40 minutos que los recopila.

La otra caja es un verdadero tesoro para coleccionistas ortodoxos, ya que incluye los 10 álbumes que tuvieron su mezcla monoaural, más el denominado Mono Masters, que reúne los tracks en mono aparecidos en singles y EP. Entre esos 11 álbumes figuran los 6 que también tienen mezcla alternativa en monoaural, pero jamás fueron editados en ese formato. Tanto Help! como Rubber Soul incluyen la mezcla original en estéreo realizada en 1965. No trae Yellow Submarine, Abbey Road ni Let it Be, que no tienen ninguna versión en mono. Todos los discos replican el arte (con etiquetas y fotos) de las bellas ediciones originales en vinilo.

Según se puede apreciar en los discos de muestra, la adjetivación de “amorosamente” en el comunicado de EMI no es exagerada: el equipo de trabajo estuvo liderado por Allan Rouse, un hombre que colaboró en todas las remezclas, masterizaciones y trabajos de intervención hechos sobre esas entrañables cintas maestras desde que se editaron en CD por primera vez en 1987, hasta Love en 2006, el collage sonoro hecho para Cirque Du Soleil. Se trabajó durante cuatro años en una labor notable y artesanal, que respeta el espíritu de las grabaciones analógicas multipista originales, pero logra pulir y realzar sonidos, atmósferas y rangos que estaban ocultos o tímidamente esbozados.

Cabe subrayar que ninguno de los intentos anteriores por remozar estas canciones –uno de los repertorios más importantes del siglo XX– alcanza el nivel que tiene esta reedición, dado que el objetivo fue lograr que suene aun mejor aquello que ya sonaba maravillosamente. No lo logró la salida del proyecto Anthology en 1995 (con su mix de “reunión”, relato oficial de la historia del grupo y edición de los out-takes que andaban perdidos en mares piratas), ni la nueva mezcla en estéreo y surround 5.1 de la banda de sonido del film Yellow Submarine de 1999; tampoco el compilado de singles bautizado 1, que apareció en el 2000 con remasterización digital, y mucho menos el polémico Let it be… naked o el ninguneado collage sonoro de Love.

La pregunta final que todos se hacen es: ¿suenan mejor? David Cavanagh, crítico de la revista inglesa especializada Uncut, alza los pulgares en una de las primeras reseñas aparecidas en internet y dice con entusiasmo: “La palabra clave es ‘claridad’. (…) Las voces y los instrumentos son claros, puros, humanos, naturales (excepto, por supuesto, cuando son filtrados por efectos psicodélicos) y despojados de décadas de polvo”. También hubo un artículo favorable en el New York Times, firmado por Allan Kozin tras haber oído el material en forma completa: “En la mayoría de los casos –escribió– la música tiene una dimensión y detalle que nunca antes había tenido, y el nuevo empaque refleja la importancia musical y cultural de cada álbum”. Asegura que el sonido ha mejorado si se lo compara con el que hoy arrojan los CD originales de 1987, y afirma: “Las mejoras más notables y coherentes están en el bajo sonando pesado y redondo, como en tres dimensiones, y los tambores que ahora suenan como tambores, en lugar de parecer algo golpeado a la distancia”. Destaca The Beatles (el disco doble también llamado Álbum blanco) y Abbey Road como los más beneficiados. Confirma que en algunos apenas se notan esas mejoras, y que otros han mejorado de manera radical.

A partir de este miércoles, fans de todo el mundo seguramente iniciarán un intenso debate. Lo concreto es que estamos ante el bienvenido realce sonoro de aquello que –entre muchas cosas– distinguió a los Beatles: el impecable uso del estudio de grabación, fruto del permiso concedido por George Martin, su legendario productor, que adivinó el genio en ellos desde la primera vez que los escuchó. Así, paso a paso, desde la candidez de la armónica primigenia de “Love Me Do” hasta los riesgos sonoros con que midió el enorme talento de sus miembros durante la segunda mitad de su existencia, el grupo consolidó una obra basada en una combustión infalible: canciones perfectas, audaces armonías vocales y una destreza instrumental que corrió paralela a logros compositivos impensados hasta el momento para cualquier agrupación que interpretara “música ligera”. Elementos entramados con una belleza y originalidad que esta remasterización, con sus sutiles retoques, acercan a una lozanía definitiva.



OPINIÓN

¿La caja? La escuché toda
Roberto Pettinato


Es el negocio del nunca acabar. Todavía quedan cientos de cintas en los baúles y es así como los Beatles nunca morirán y ya –como en mi caso– entraron con su “Submarino amarillo” en un niño de un año y medio con esa alegría sin igual. Porque son eso: ¡el sinónimo más claro de que se puede ser feliz! ¿La caja? La escuché toda. Primero puse “Dear Prudence” y luego “Trufas en el Savoy”. Si querían sonar como un disco de U2, lo lograron. La batería y el bajo tienen la dimensión que nunca oiste antes. ¡Y el bombo de “Yellow Submarine” es de cuero seco!

Pero lo mas impresionante es escucharlo desde lejos. Lo puse, cerré la puerta y me fui a otro ambiente. ¿Resultado? Los Beatles estaban en aquel cuarto, no sonando... sino… ¡tocando ahí! Eso sí que es impresionante, porque tu paranoia de no tener a quien pedirle su parte para pagar el alquiler parece haber terminado.

¡Ah! En “Dear Prudence” hay cuatro sonidos que nunca antes escuché y varios coros que no sabía que existían. Cuando grabás, el gran tema en los discos es que muchas cosas no son perfectas pero en el total de la obra no se notan. Aquí, las armonías son impecables y afinadísimas.

Y algo más: siento mucho que a ellos les gustará mas el Sgt. Pepper en mono que en estéreo. ¡También siento mucho que nadie me pueda explicar por qué la caja en mono cuesta más dinero que la otra! Ja.

Los Beatles, la única banda del mundo en la que todos sus temas, de sus catorce discos oficiales, fueron aprendidos de memoria por toda la humanidad. ¿Qué más se les puede pedir, pequeñas basuritas drogotas de Oasis? ¡Vuelvan con sus madres, infelices! Ja.

Diario Crítica Argentina

1 comentario:

Felipe Garcia Fossa dijo...

justo me lo estaba terminando de bajar ... estoy seguro que estara genial