jueves, 8 de septiembre de 2011

(What's The Story) Noel Gallagher?

A lo largo de gran parte de la década del 90 habrías estado en apuros para encontrar una fuente de desvergonzadas estrellas de rock contorneantes más confiables que los hermanos Gallagher de Oasis. Liam en la voz, Noel en la guitarra, ambos armados con cejas espesas y ceños fruncidos de hago-lo-que-me-da-la-gana. El par personificó una arrogancia agresiva que los músicos (que no sean Kanye West) no parecían estar interesados ​​en encarnar más.

Entre aquellos sucesos privados de bravuconerías: Noel Gallagher, quien, en una soleada tarde de agosto se sienta en un restaurante de un hotel en West Hollywood se toma un capuchino y se preocupa por el primer ensayo con su nuevo grupo, los High Flying Birds.

"Tengo que regresar a Londres hoy y tocar con cinco chicos con los que aún tengo que tocar", dice Gallagher, no mucho después de concluir su participación en un video musical. "Yo los conozco a todos-son amigos míos. Sin embargo, tres de ellos no se conocen entre sí, y nunca hemos tocado juntos antes." Se ríe con tristeza. "Yo podría estar sentado allí mañana por la noche diciendo: '¡Qué puto gran error!'".

"Conoce al nuevo jefe, mucho menos seguro de sí mismo que el antiguo jefe. Gallagher formó High Flying Birds, -aunque, en realidad, él es el único miembro permanente- luego de la ruptura típicamente mordaz de Oasis en el 2009. (Lo único que unió a los Gallaghers de cerca más que su confianza fue su repugnancia mutua) Liam tiene una nueva banda, también: Beady Eye, que publicó su debut a principios de este año. Pero donde ese disco empezó fue precisamente donde Oasis dejó Dig Out Your Soul, Noel Gallagher's High Flying Birds (que saldrá a la venta el 8 de noviembre) revela un lado más suave y soñador, está lleno de grandiosas canciones pop y baladas exuberantes con cuerdas y vientos más Abbey Road que el Revolver, para decirlo en términos familiares para cualquier fan de Oasis.

Gallagher armó el disco de un grupo de 38 canciones que había escrito, lo grabó en Londres y Los Ángeles con el productor Dave Sardy. (¿Por qué Los Ángeles? "Me gustaría decir que es por alguna teoría romántica del rock and roll, pero todo que tiene ver con el comercio", dice Gallagher. "Si un estudio cuesta en Inglaterra £ 2.000 al día, un estudio en los Estados Unidos te costará 2.000 dólares al día. No es necesario ser un genio para eso.") Está muy orgulloso de la música, pero reconoce que ser un frontman no es un trabajo que asume naturalmente. "Yo lo hice antes en conciertos acústicos para la caridad, pero en mi cabeza siempre pensaba que estaba haciendo un favor a alguien, así que ¡qué se jodan!'", dice. "Estar parado en medio del escenario y tener que tratar de venderle algo a alguien, no es lo que estoy esperando en lo más mínimo.

A
simismo, Gallagher es ciertamente tibio en el concepto de volver a los lugares del tamaño del Beacon Theatre, donde actuará el 14 y 15 de noviembre. (En diciembre de 2008, Oasis tuvo su último concierto en la ciudad de Nueva York en el Madison Square Garden.) "No hay mejor medio que un jodido estadio con 60.000 personas", dice. "Y ahora tengo que volver a bajar hasta el fondo y tratar de construir todo de nuevo. Si soy sincero, yo en realidad desearía que este fuera un álbum de Oasis. Pero no puedo dar marcha atrás".

Así que ¿por qué preocuparse, entonces? Sin duda, los clásicos modernos como "Wonderwall" y "Champagne Supernova" siguen generando las masas suficientes para mantener a Gallagher con camisas de vestir claras a las que se ha acostumbrado. "Bueno, he tenido un tercer hijo", responde. "Tenía que salir de la casa." Y además, agrega con una sonrisa pícara, "Soy demasiado bueno para no hacer nada".

No hay comentarios: